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“Las tendencias lo que dicen es volver a usar los colores típicos de la época y vestirse con mucho glamour pero, realmente te digo que pienso que deberían usar, la ropa con la que se sientan más cómoda y puedan bailar toda la noche”, dijo el diseñador.
Entre los colores clásicos de estas fiestas que Miguel recomienda, no puede faltar el rojo, dorado y como siempre el negro. El vestido que nunca debe faltar es el clásico vestido negro, con el que se puede complementar con los accesorios que más convengan a la ocasión y hora.
“Mientras que las lentejuelas no deben faltar este año, eso lo estaremos viendo por todos lados”, agregó Genao.
El joven diseñador tuvo un año de grandes cambios y retos, primero porque se embarcó en el desarrollo de su más ambicioso proyecto como lo fue la creación de la colección Inopia, con la cual alcanzó el premio de mejor colección de un diseñador emergente, en el marco del Caribbean Fashion Week, y esto le permitió presentarse en playas extranjeras, en el Puerto Rico High Fashion Week, la cual tuvo una excelente acogida por parte de la prensa especializada de ese país.
El éxito de Miguel Genao este año se debió a tres factores claves, primero la colaboración y apoyo de todos los profesionales que trabajaron en su equipo, desde el apoyo de la prensa hasta su estilista, el CFW y su equipo en taller, segundo el haber podido desarrollar el gran proyecto que fue Inopia y tercero el apoyo incondicional de su familia.
Aprovechó para aconsejarles a otros diseñadores emergentes que tienen el talento más no las oportunidades, que se esfuercen al máximo para que todo lo que deseen pueda visualizarse y proyectarse, que siempre se mantengan estudiando y investigando sobre los cambios a nivel internacional que suceden en el mundo de la moda y que nunca permitan que se extingan sus sueños, porque este es un medio difícil, pero con esfuerzo todos pueden llegar.
