12 septiembre 2012

Del orfanato a las pasarelas en Nueva York

AG/N.Y. Hace apenas dos meses que la joven Fior Méndez vivía en la República Dominicana. El orfanato “Niños de Cristo” era su hogar, cuidando de sus hermanos y hermanas.

Tras cumplir los 21 años, debió salir del lugar, pero de aquí saltó a la fama y en estos días camina sobre las pasarelas de la Semana de la Moda en Ciudad de Nueva York.

En un reportaje publicado en “Today.com”, bajo la firma de Bennett Raglin, y fotos de Getty Images, la huérfana dominicana cuenta su historia a través de un traductor y del cambio maravilloso que ha dado su vida en unas cuantas semanas.

“Me siento muy emocionada, es todo un sueño. No podía imaginar que una persona como yo estaría haciendo esto en Nueva York”, dijo.

La modelo ha logrado exhibir los modelos de Nzinga Knight, una diseñadora estadounidense y musulmana con antecedentes caribeños.

Un buen amigo Sonia Hane, fundadora de la organización, invitó a la aspirante a modelo a vivir con ella en Nueva York, y a aprender inglés. Eso permitió que la joven se reuniera con un agente de talentos, tuvo la ocasión de modelar para Knight.

La diseñadora Knight ni siquiera sabía la historia de Méndez, cuando la contrató para usar sus diseños en el quinto desfile de Harlem’s Fashion Row. Knight recuerdo cómo “justo en mi tercera sesión de selección de modelos estaba a punto de terminar, Fior Mëndez entró al lugar y caminó con esta expresión fabulosa en la cara, más una belleza natural”, recuerda la diseñadora.

Luego se enteró sobre los primeros años de vida de la joven, llenos de soledad y de un futuro incierto. Méndez con frecuencia se mudaba con su madre y cuatro her- manos, y pocas veces sabían cuándo tendrían la próxima comida.

Cuando Méndez tenía 13 años, la madre decidió que no podría cuidar de todos los niños. Dejó a la niña en el Orfanato Niños de Cristo, y desde entonces la joven no ha tenido contacto con su familia.