15 octubre 2012

Practicar una religión combate las enfermedades crónicas
Las religiones apuntan a cuidar el alma pero también resultan muy beneficiosas para soportar los problemas del cuerpo. Las personas que practican una religión o tienen una vida espiritual importante logran tolerar mucho mejor el estrés y los problemas físicos que generan las enfermedades crónicas.

Los investigadores de la Universidad de Missouri(Estados Unidos) que llegaron a estas conclusiones detallaron que "aunque las mujeres generalmente son más religiosas o espirituales que los hombres, encontramos que a ambos géneros les conviene confiar más en los recursos espirituales y religiosos cuando enfrentan enfermedades o discapacidad".

El psicólogo Brick Johnstone, uno de los especialistas a cargo del estudio, explicó que trabajaron con hombres y mujeres que sufrían distintos tipos de enfermedades o discapacidades, como accidente cerebrovascular, daño cerebral o cáncer.

El equipo de especialistas analizó a fondo su salud física y estado emocional, y también les presentó un cuestionario destinado a evaluar su religiosidad, nivel de espiritualidad y al apoyo y acompañamiento que recibían de sus congregaciones religiosas.

Johnstone encontró que los hombres que cuentan con apoyo de sus congregaciones sienten que tienen una mejor salud. En el caso de las mujeres, su bienestar mental mejora gracias a la espiritualidad diaria, la práctica de perdonar o pensar en Dios. El psicólogo subrayó que por estos motivos practicar una religión ayuda a las personas a lidiar mejor con las enfermedades crónicas.

"Ambos géneros se benefician con el apoyo social, es decir con la capacidad de buscar ayuda y confiar en los otros, siempre y cuando las personas a las que recurren estén involucradas en organizaciones religiosas. Sugerir a las personas que busquen apoyo religioso y espiritual puede ayudarlos a lidiar con los síntomas físicos y el estrés relacionados a las enfermedades", sostuvo Johnstone.

El especialista incluso recomendó que los médicos y profesionales de la salud sugieran a sus pacientes que aprovechen de estos beneficios de la religión. Stephanie Reid-Arndt, otra psicóloga que participó del estudio, afirmó que "hay muchas maneras de lidiar con situaciones estresantes, como las enfermedades crónicas, e involucrarse en actividades religiosas y espirituales es una estrategia efectiva".