10 enero 2013

Muchas veces la gente piensa que hacer varias cosas al mismo tiempo es un beneficio, pues para Tomasz Paczkowski, un joven polaco quien, sufrió graves quemaduras en su cara luego de llevarse una plancha hirviendo a la cabeza al confundirla con el teléfono mientras ayudaba a su esposa a planchar la ropa, resultó ser todo un accidente. 

Luego de que su esposa le reclamara que nunca ayudaba en las tareas del hogar, Tomasz quiso colaborar y comenzó a planchar la ropa recién lavada. Preparó la mesa, se abrió una cerveza y puso una pelea de boxeo en la tele. A los pocos minutos sonó el teléfono, y en el apuro por atender, se confundió y levantó la plancha hirviendo, llevándosela a la cara.

"Estaba planchando lo más tranquilo, pero me emocioné con la pelea en la televisión, y no me di cuenta. Simplemente me confundí", contó Tomasz. "Quise atender lo más rápido posible y con la plancha en mi mano, la presioné contra mi oído".

Para colmo, con la cara casi en llamas, Tomasz salió corriendo para el baño a mojarse, pero en el camino se tropezó y se dio con la puerta en el ojo.

Luego de ser atendido de urgencia en el hospital, los médicos le aconsejaron reposo absoluto, y por unos cuantos días no ayudará a su esposa en las tareas del hogar.