Mandy Sellars, de 38 años, padece una extraña enfermedad que provoca que sus piernas crezcan sin control durante toda su vida.
Los médicos han encontrado un tratamiento para detener la enfermedad después de mapear su ADN.
Cuando las pruebas genéticas revelaron que tenía una enfermedad nunca vista, comenzó la pesadilla de Mandy Sellars.
Su pierna izquierda creció descontroladamente y se infectó con septicemia. Fue necesario amputarle esa pierna pero eso no detuvo la enfermedad. El muñón pronto comenzó a crecer también y, en tres años.