Agencia EFE. Milagro en el aire, y en el mar. Un avión de la compañía aérea Lion Air, con 101 pasajeros y siete tripulantes a bordo, cayó hoy al agua después de sobrepasar la pista del aeropuerto de la isla de Bali, en Indonesia.
Todos los ocupantes del vuelo sobrevivieron al accidente aunque una decena de ellos fueron atendidos en el hospital general de Bali por heridas leves causadas por golpes o cortes.
El avión, un Boeing 737 que procedía de Bandung, ciudad industrial de la vecina isla de Java y que tenía previsto aterrizar en el aeropuerto internacional de Denpasar, sobrepasó la pista por causas que se desconocen y que están siendo investigadas, indicó el servicio de Aviación Civil.
Las autoridades del aeropuerto balinés señalaron en un principio que a bordo del avión viajaban 172 pasajeros, aunque más tarde Lion Air informó de que el pasaje estaba compuesto por un total de 95 personas adultas, cinco niños y un bebé.
Las imágenes del accidente mostraron una fractura en el fuselaje a la altura de las alas del avión, que quedó flotando sobre el mar y a unos 200 metros del final de la pista de aterrizaje, así como a varios pasajeros en el agua con los chalecos salvavidas puestos.
El jefe de Policía de Bali, Arif Wahyunadi, dijo al canal local de televisión One TV, que todos los pasajeros y miembros de la tripulación fueron rescatados y transportados a la terminal del aeropuerto para ser examinados.
El avión, un Boeing 737 que procedía de Bandung, ciudad industrial de la vecina isla de Java y que tenía previsto aterrizar en el aeropuerto internacional de Denpasar, sobrepasó la pista por causas que se desconocen y que están siendo investigadas, indicó el servicio de Aviación Civil.
Las autoridades del aeropuerto balinés señalaron en un principio que a bordo del avión viajaban 172 pasajeros, aunque más tarde Lion Air informó de que el pasaje estaba compuesto por un total de 95 personas adultas, cinco niños y un bebé.
Las imágenes del accidente mostraron una fractura en el fuselaje a la altura de las alas del avión, que quedó flotando sobre el mar y a unos 200 metros del final de la pista de aterrizaje, así como a varios pasajeros en el agua con los chalecos salvavidas puestos.
El jefe de Policía de Bali, Arif Wahyunadi, dijo al canal local de televisión One TV, que todos los pasajeros y miembros de la tripulación fueron rescatados y transportados a la terminal del aeropuerto para ser examinados.