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Santiago.- El presidente de la República, Danilo Medina, encabezó este martes el acto en el que la Primera Dama, Cándida Montilla de Medina, dejó iniciados los trabajos de construcción del Centro de Atención Integral a la Discapacidad (CAID), en Santiago, el segundo que se levanta para la atención a niños de entre 0 a 10 años de edad.
El primero de estos centros será inaugurado en las próximas semanas y está localizado en la avenida Luperón, casi esquina Enriquillo, en el municipio Santo Domingo Oeste, en la Capital.
Al pronunciar el discurso central del acto, la Primera Dama Montilla de Medina agradeció a Dios la oportunidad que le brinda junto a su esposo, el presidente Medina, de trabajar a favor del desarrollo integral de la niñez dominicana en condiciones especiales.
“Como lo he reiterado en diversas ocasiones, desde hace un buen tiempo, el Presidente de la República y quien les habla, hemos tenido mucha preocupación sobre la necesidad de construir un Centro para ayudar en el desarrollo integral a la niñez en condiciones especiales. Por eso, al día siguiente de llegar al gobierno, se estableció como una prioridad, como un proyecto de nación, la construcción del Centro de Atención Integral para la Discapacidad (CAID), cuya sde central será inaugurada en el Distrito Nacional, antes de concluir el presente año”, expresó.
La Primera Dama explicó que tanto el presidente Medina como ella tuvieron la inquietud sobre los costos que le generaría a una familia trasladarse desde el Cibao hasta Santo Domingo para atender a sus niños con alguna discapacidad en el CAID, por lo que se plantearon la necesidad de cubrir otras regiones del país.
“Por tal razón, pensando en los pequeños de Santiago y de todas las provincias que conforman la región, hoy dejamos iniciada la construcción del CAID en Santiago, para que todas esas familias de escasos recursos puedan beneficiarse de este Centro, sin tener que viajar hasta Santo Domingo para llevar a sus niños y niñas”.
Montilla de Medina precisó que el CAID constituye un espacio integral, con los más altos estándares internacionales, donde los niños especiales podrán tener un desarrollo autónomo, que fortalezca sus capacidades y habilidades, para lograr una vida con calidad y dignidad, lo que les permitirá alcanzar la realización personal y contribuir con su participación en las actividades sociales, educativas, laborales y culturales.
En el CAID, los niños recibirán atención básica, a partir de una evaluación médica, para crear los perfiles específicos que orientarán la aplicación de las más modernas y diversas terapias existentes, a fin de desarrollar habilidades en estos infantes y representa una de las grandes obras de la gestión del presidente Danilo Medina, dijo la Primera Dama.
“Sin duda alguna estamos haciendo algo que nunca se había hecho, dando respuesta a la enorme demanda de servicios que requieren estos niños y niñas con condiciones especiales, pero, además estamos promoviendo en la población el incremento de la sensibilidad y de la solidaridad social, así como de mayor alerta y conciencia sobre la realidad de este colectivo infantil”.
La esposa del presidente Danilo Medina informó que en los próximos días viajará a Lima, Perú, para firmar un acuerdo de cooperación interinstitucional con el Centro Ann Sullivan del Perú (CAPS), un modelo educativo exitoso y referente obligado en los servicios que brinda a personas con necesidades especiales.
Montilla de Medina valoró la importancia del servicio hacia los demás y citó al Papa Francisco, a quien conoció personalmente al encabezar la delegación dominicana que asistió a la ceremonia de entronización del Sumo Pontífice, en Roma: “No debemos tener miedo de la bondad, ni tampoco de la ternura. El verdadero poder es el servicio. Se necesita cuidar a la gente, cuidar de cada persona con amor, especialmente a los niños, y a todos los que son frágiles”.
La Primera Dama de la República, Cándida Montilla de Medina, proclamó su deseo de regresar pronto a Santiago a dejar inauguradas las instalaciones y a abrir las puertas del CAID, al que define como “un centro de amor y esperanza” y un compromiso de todos.
