Dos hombres oriundos de Kenya, al este de África, aceptaron casarse con la misma mujer, ya que ella dice que no puede decidirse por ninguno de los dos.
Sylvester Mwendwa y Elijah Kimani finalmente llegaron a un acuerdo, luego de descubrir que los dos habían estado en pareja con la misma mujer por más de cuatro años. Si bien muchos hombres dejarían a su novia luego de semejante noticia, ellos decidieron definir un sistema de rotación en el que cada uno verá a la mujer en días distintos.
También accedieron ambos a vivir (en sus respectivos días) en la casa de la mujer y actuar como padre de los dos hijos de ella, así como de cualquier otro hijo que dé a luz. Todo quedó registrado en un acuerdo escrito en el que se aclara que no sentirán celos del otro hombre, que vivirán en paz y que nadie los forzó a aceptar el arreglo.
Afortunadamente, en Kenya casarse con más de un hombre no es ilegal, siempre y cuando uno pueda demostrar que la poligamia es parte de sus costumbres.