Twitter @pamelagomezRD
Instagram @pamelayadiel
Sí, ¡lo sé! ya sabes cuál es la pregunta y tu al igual que yo ha tenido que responderla cada vez que te encuentras a una persona con quien tienes mucho tiempo sin hablar, creo puedo jurar en algún lugar hay un libro de reencuentros que explica la primera pregunta que debe hacerte alguien cuando lo vuelves a ver es: ¿Estás casada?
Podría resultar halagador si la interrogante se debiera al porqué no lo estamos si nuestras cualidades son suficientes para estarlo, pero no es la cuestión. La curiosidad viene de que hay otro libro que dice las mujeres deben estar casadas o con hijos a cierta edad y que si pasas de la "edad tope" para formar una familia vas a quedarte sola o que tus hijos te llamarán "abuela".
¿Si me molesta la pregunta y el asombro? Sí, porque no creo con 26 años de vida deba andar por el mundo desesperada buscando chico para formar una familia, no creo mi sistema reproductivo se esté deteriorando o que la próxima Navidad sea la fecha límite para agrandar la familia, no, no lo creo y creo tampoco mis acosadores deben creerlo.
Quisiera decir mi soltería ha sido una elección totalmente mía, he tenido la oportunidad de establecer una relación de pareja, pero aún no encuentro alguien que me haga sentir su compañía sea mejor que mi soledad. Está también el caso de sentirme atraída por personas que no lo están hacía mi o a la inversa, pero ya ese es material para otro escrito.
El otro tema son los hijos, creo no estoy en el momento mental ni económico para traer a un hijo al mundo, aunque he vivido algunas etapas de mi vida antes de tiempo, todas las he disfrutado a plenitud y no quiero tener un retoño cuando aún siento los deseos de amanecer de fiesta o irme de paseo sin fecha de retorno.
Las mujeres no somos iguales, no todas tenemos las mismas necesidades físicas y emocionales o reaccionamos a la soledad o compañía de la misma manera y definitivamente no nos defendemos a los ataques de "te estas quedando" igual, por lo que recomiendo a ti que al igual que yo somos víctimas de conocidos, amigos, compañeros de trabajo, familia y uno que otro desconocido que nos ataca sin piedad por no tener quien nos diga mamá o alguien que ocupe un lugar a nuestro lado en la cama, que vivas a tu tiempo y no tomes decisiones apresuradas tratando de cumplir con una cuota social, porque al final del día posiblemente tú seas la única con tu hijo en las madrugadas cuando esté enfermo, quien pague su escolaridad y los gastos de pañales desechables y alimento.
Es tu decisión, es tu cuerpo, es tu vida, es tu tiempo, disfruta de este momento de soltería mientras llegan los demás y espero los disfrutes igual; crea muchas historias de esta época para que tengas mucho que contarles a tus nietas.