Beyonce celebró haber perdido casi 30 kilos ( 60 lbs) luego del nacimiento de su hija Blue Ivy en enero durante su primer concierto post embarazo.
Byonce sabía que no había tiempo que perder, solo peso, mientras más se acercaban las fechas de sus cuatro conciertos en Atlantic City. Sobre todo porque se iba a presentar en trajes muy ajustados de Raph & Russo, incluyendo piezas adornadas con Swarovskis.