Reino Unido se convierte en el primer país en introducir la secuenciación genética en un servicio de salud general. El Gobierno británico ha anunciado la creación de una base de datos de ADN en la que incluirá la secuenciación completa de los genomas de unos 100.000 británicos que sufren cáncer y enfermedades raras.
Cameron confía en poder "transformar la forma de diagnosticar y tratar las enfermedades"El objetivo es impulsar el descubrimiento y desarrollo de nuevos fármacos. La secuenciación genética brindará a los médicos una comprensión más avanzada de las enfermedades de sus pacientes a fin de decidir qué medicinas y otros tratamientos necesitan.
El Gobierno del primer ministro David Cameron ha destinado 100 millones de libras (unos 124 millones de euros) en los próximos años (entre tres y cinco) al proyecto del Servicio Nacional de Salud (NHS, por sus siglas en inglés), financiado por los contribuyentes. El Ejecutivo defiende que así se podría reducir significativamente la cantidad de muertes prematuras por cáncer dentro de una generación.
"Al desbloquear los datos sobre ADN, el NHS liderará la carrera mundial para conseguir mejores pruebas, mejores medicamentos y, por encima de todo, un mejor cuidado", ha explicado el propio Cameron, quien confía en poder "transformar la forma de diagnosticar y tratar las enfermedades más complejas en todo el mundo".
¿Cómo se utilizarán los datos ?
Algunos críticos del proyecto, conocido como "el plan genoma del Reino Unido", han expresado su preocupación por cómo se utilizarán los datos y se compartirán con terceros, incluyendo organizaciones internacionales como compañías farmacéuticas.
Los datos serán anónimos antes de almacenarseGenewatch, un grupo que lucha por la ciencia genética y para que las tecnologías se utilicen basándose en el interés público, ha dicho que nadie con acceso a la base de datos podría utilizar códigos genéticos para identificar y seguir a una persona y sus familiares.
Sin embargo, la oficina de Cameron defiende que la secuencia del genoma será totalmente voluntaria y los pacientes podrán decidir no participar sin que ello afecte su atención en el NHS. Además, avisan de que los datos serán "completamente anóni